La lampara a suspensión se inspira en las sugestiones derivadas de antiguos faroles orientales a las más domésticas pajareras. La realización nace de la observación de los radios de una rueda de bicicleta, de los que el proyecto toma también el nombre: Spokes, que en inglés significa precisamente radios. El resultado es una lámpara de forma suave y con un volumen ligero que contiene la luz, dejándola filtrar en el espacio. La ligereza que caracteriza el proyecto se combina con la solidez de la forma, realizada con varillas de metal, y con la funcionalidad de la fuente luminosa del LED, que permite iluminar perfectamente la zona y obtener juegos de luces y sombras, proyectados en las paredes con un efecto mágico de multiplicación.